Hay algo en lo que me vengo fijando en los últimos años y es que las novelas juveniles románticas (también las de vampiros como Anhelo)están cambiando para bien. Save me de Mona Kasten es un ejemplo de ello.

Kasten es la autora de la serie Again, todo un fenómeno mundial que ha cruzado fronteras y ha triunfado en países como Bulgaria, Croacia, Eslovenia, Francia, Holanda, Hungría, Italia, Letonia, Polonia, Portugal, República Checa, Rumanía, Rusia, Serbia y Taiwán. Ahora, llega a España con una nueva colección de novelas juveniles románticas titulada Save me. En esta primera entrega, conoceremos a Ruby y James, dos jóvenes estudiantes de uno de los colegios más prestigiosos, Maxton Hall College, que pertenecen a clases sociales distintas. Ya podemos entrever qué va a ocurrir y cuándo va a ocurrir, pero lo importante, también, es cómo se van a sucederse los acontecimientos. ¡No perdáis ojo!

Save me Mona Kasten juvenil

¿Cómo se van a suceder los acontecimientos? Es obvio que en este libro habrá una historia de amor entre dos protagonistas que pertenecen a mundos totalmente opuestos. James es hijo de uno de los empresarios más influyentes del país y tiene un nivel de vida altísimo en comparación con Ruby, estudiante del Maxton Hill gracias a una beca de estudios y con una familia bastante humilde. Tampoco nos sorprende que ambos se llevarán bastante mal en el inicio. Los tira y afloja son una de las cosas que más me gustan de las historias de amor (por eso no me gustó Hopeless -debo ser la única-). La tensión que se crea en este tipo de novelas es bastante divertido y, aunque el lector sabe que se va a resolver para bien, lo disfrutamos como si fuese el primer libro que leemos de este tipo. 

Hasta aquí todo normal. Pero, de un tiempo a esta parte, las novelas juveniles nos están sorprendiendo con nuevos valores. En primer lugar, la chica ya no es una damisela en apuros, sino una guerrera de armas tomar que llega con todo a la historia. Es cierto que el tema de la virginidad todavía tenemos que afinarlo un poco, pues suelen ser ellas las que nunca han tenido sexo y ellos quienes las inician en él pero, por lo demás, el patrón femenino está cada vez más igualado al patrón masculino. Ruby, sin duda, tiene carácter y ejerce un rol bastante protagonista en la historia. En segundo lugar, cada vez vemos mayor cantidad de relaciones LGTBI en estos libros de forma natural. Y esto es importante: una cosa es que aparezcan relaciones homosexuales, por ejemplo, y se haga mucho hincapié en ello, como si el autor/a quisiese que el lector entendiese (porque se presupone que el lector es tonto) que eso es bueno, que es normal y, entonces, parece de todo menos normal, y otra, que no se resalte más que el resto de relaciones y sencillamente ocurran. En Save me, hay bastante presencia de este tipo de relaciones y, de hecho, tienes que leer varias veces para comprobar que estamos hablando de personas del mismo sexo porque no se resalta en fosforito para hacerlo más evidente, sino que es todo muy natural y normal. Además, ocurren en el grupo de amigos del chico más popular de todos y no de manera marginal, lo que le otorga mucho valor. Y, en último lugar, el discurso también ha cambiado. Ya no estamos ante el discurso de «soy un chico malo y peligroso» mientras todos sabemos que lo que le pasa es que está roto por dentro y necesita esa fachada para sobrevivir, igual que no estamos ante una protagonista femenina que se cree ese discurso. Lo habitual es que el chico te diga que es peligroso y tú te lo creas porque te gusta que sea peligroso. Pero en Save me, y esto es lo que más me ha impresionado, Ruby no se lo cree y le rebate con argumentos de «tú no eres así, no me vengas con cuentos, deja ya el perfil de destructor y échale huevos a la vida», básicamente. Me estoy inventando lo que va entre comillas, pero es para que me entendáis. A Ruby no le gusta el rollo ese de chico malo y más sabiendo que no lo es, así que bye bye diálogo tóxico, vamos a hablar claro porque si realmente eres malo, conmigo no cuentes. 

Asistiremos a una fuerte tensión sexual hasta la mitad del libro, aproximadamente, con escenas muy divertidas y, en este punto, comenzaremos a tener una tímida historia de amor que explota y salta por los aires durante varias páginas románticas y excitantes por partes iguales. Varias páginas de sexo, sí. Sexo en un enclave muy famoso y no solo por ser conocido mundialmente, sino también por sus garbeos en el cine.

Para terminar, el cierre de la novela es totalmente abierto, con una invitación a proseguir la serie Save me, cuya segunda parte llegará a España en junio y la tercera en octubre. Termina con un dramón de los buenos que da sentido al eslogan «solo un beso puede salvarme».

Save me, de Mona Kasten, el nuevo fenómeno juvenil, avanza hacia delante, rompe clichés, iguala roles, incluye nuevos modelos de relaciones y, con ello, nos impulsa a todos hacia un tipo de literatura juvenil más sana, más recomendable. 

La Reina Lectora