reseña del libro hasta que el sol deje de brillar de angels almenay

Quizás por el deseo de que el sol no deje de brillar, la novela romántica de Angels Alemany me parece muy recomendable para el verano. También la ubicación, de la que hablaremos a lo largo de la reseña, y los días despreocupados de una adolescente de 17 años que se ha enganchado a un amor kamikaze. Esta es la reseña de Hasta que el sol deje de brillar.

El amor adolescente siempre es un poco kamikaze. 

Impactante comienzo el de la novela que nos ocupa. Nuestra protagonista entra en silla de ruedas al quirófano y a los veinte minutos vuelve a salir de él. Algo ha pasado

Automáticamente, comienza la historia. Estamos en 2022 y partimos con una premisa-cliché que nos encanta en la novela romántica: Él ha vuelto. O mejor dicho ÉL, con mayúsculas, ha vuelto. Porque este pronombre es conflictivo, kamikaze y desesperadamente atractivo. Un primer encontronazo entre ÉL y ella nos deja claro que no se llevan bien (¿Enemies to lovers? 😈), nuestro prota parece arrepentido y ella enfadada. Pero sea como fuere, ahora sus vidas discurren por otros derroteros, con parejas diferentes y vidas distintas.

Entonces la historia da un salto en el tiempo y nos situamos en 2016. Sofía y Pablo, nuestros protagonistas, son jóvenes y adolescentes. Pablo es el mejor amigo del hermano de Sofía y pasa mucho tiempo en casa de este y, por tanto, de ella. 

Efectivamente, la trama nos va a ser contada intercalando pasado y futuro, una fórmula que, dadas las diferencias que hay entre Pablo y Sofía en uno u otro tiempo, engancha bastante.

¿En qué momento todo se jodió? ¿Quién se suicidó primero?

El beso que lo cambia todo.

Por la estructura narrativa de Angels Alemany en Hasta que el sol deje de brillar vamos a leer realmente dos historias en paralelo. Una de enemies to lovers, como ya anticipé un poco más arriba, y otra de friends o de «soy la hermana pequeña de tu amigo» to lovers

Si sois gente impaciente como yo, ya os adelanto que el beso llega rápido, aunque recordad que estamos ante dos tramas en dos tiempos diferentes y con dos personajes que, aún siendo los mismos, tienen arcos evolutivos distintos según la fecha. Así que, para no revelar mucho de la trama, os dejo que averigüéis vosotros si el beso llega rápido en 2016 o en 2022. 

Lo que sí que vamos es a analizar la filosofía de este porque como no podía ser de otra manera en una novela romántica, y Angels Almenay lo ha dado todo en esta, el beso lo cambia todo

Todos y cada uno de los besos de este libro son bonitos, inolvidables y tienen un efecto muy potente en la trama y en los protagonistas.

¿Es condición necesaria que los protagonistas de un libro te caigan bien?

Pablo y Sofía son dos personajes muy bien diferenciados, con psicologías propias. Asimismo, tenemos algunos secundarios con un peso importante en la trama, como Lucas, el hermano de Sofía, o Aitor, un ex novio de Sofía, o Martín y Pilar, las nuevas parejas de Pablo y Sofía. O Pau, que ahora mismo no te puedo decir quién es. Sin embargo, algo que me pregunto a menudo cuando leo libros es si es condición necesaria que todos los personajes te caigan bien. Y la respuesta es como en la vida misma: no. 

Así que Pablo me cae mal. Muy mal. Está muy cachas, lleno de tatuajes, es un malote (aunque solo de fachada, como todos los malotes literarios), le saca cinco años a Sofía y no le va bien en los estudios, por lo que está preparándose para ser policía. Tampoco entiendo la mayor parte de sus decisiones y ralladas, pero puede que tú sí lo hagas y acabes babeando por él, como Sofía. 

Pero lo que voy a resaltar es algo un tanto distintivo que Angels ha conseguido en esta novela y que no es tan habitual. Por un lado, que no sea un instalove. En segundo lugar, que solo una de las partes sea la que estaba enamorada a priori. Este desequilibrio en la pareja, que uno ya llegue muy pillado por el otro y el otro llegue con total indiferencia, me parece súper original. Me gusta. Me plantea nuevos horizontes. ¿A vosotros no?

Ni instalove ni slowburn, solo un verano lleno de temazos musicales y de las playas de Mallorca.

No es un instalove, pero tampoco es un slowburn. Así que creo que Hasta que el sol deje de brillar tiene un ritmo buenísimo y un montón de escenas que te llevan siempre hacia delante. Además, en la mayor parte del tiempo todo huele a sal, suenan los grandes éxitos musicales del verano de 2005, los personajes están rodeados de apuntes y exámenes finales y las Islas Baleares relucen en todo su esplendor. Sí, esta es la ubicación, ¿puede ser más veraniega? ¿No os apetece un chapuzón en Cala Brafi?

No hay muchas descripciones y las ubicaciones se nombran de vez en cuando, pero el astro rey de esta estación, que veréis que es un símbolo que va a ser muy importante en la trama, lo inunda todo. Hay muy buen rollo y muchísimo amor, a pesar de que también viviremos problemas. Grandes problemas. 

¿Hasta cuándo se puede guardar un secreto?

Debo reconocer que hasta la página 69 no me enteré del secreto. Pensaba otras cosas sobre lo que ocurrió en la primera escena, lo de la chica entrando y saliendo del quirófano, ¿te acuerdas? Y la verdad es que este giro me dejó bastante sorprendida.

Es una trama muy teenager, pero mola bastante. Recordemos que Pablo es gilipollas, pero por lo demás todo bien. 

No puedo hablar mucho sobre el secreto, pero sí subrayar que suscita algunas interesantes reflexiones. La gestión emocional de todo el asunto por parte de una adolescente, las distintas opiniones y opciones al respecto, la forma en que las partes de la relación reaccionan a ello y lo que más me ha gustado, el debate sobre quién tiene mayor derecho de decisión sobre el asunto. 

En realidad, el secreto lo es todo. Lo que los separa y lo que, también, los vuelve a unir.

Un final feliz.

Esta novela romántica tiene un final feliz, pero para poder saber cuál es, tendrás que leerlo. Los personajes están muy enamorados a pesar de que no partían desde el mismo nivel de amor y a pesar de que hayan tenido que surfear grandes retos a su paso.

Hasta que el sol deje de brillar es una bonita historia romántica escrita por una autora con muy buenas ideas, con reflexiones muy interesantes y con una destreza narrativa que hace que todo sea muy fácil. Angels Almenay se ha empeñado en que su trama se gane la etiqueta de novela de romance y ha establecido un conflicto que, aún siendo importante y rompedor, no es insalvable. 

Cuando termina la historia, los que brillan en nuestro interior son Pablo y Sofía, con sus diferencias y con sus tensiones. Y sí, también he dicho Pablo, aunque me caiga mal.